San Matías Apóstol

Fiestas en honor a San Matías apóstol 2012

(del 10 al 14 de Mayo)

Ama la Vida

 Y vive la vida Amando

        Este es el lema que desde nuestra parroquia hemos elegido para este tiempo de la Pascua, es decir el tiempo en el que los cristianos celebramos la alegría de la resurrección de Jesús,  de que ese Jesús al que seguimos y en el que creemos, no es un personaje del pasado, de los lbros de historia o de los cuentos, sino que está a nuestro lado, que su presencia anima y guía hoy nuestras vidas, pues está vivo y presente entre nosotros. ¿Por qué hago referencia a esto? Pues, porque bien podría valernos también este lema para el barrio y para su fiesta. Ya todos sabemos que no son tiempos fáciles. Que amar la vida en estos tiempos, veces se nos hace complcado. Y cierto es que podemos bajar los brazos y quejarnos continuamente derrotados por las circunstancias.

Podemos sentarnos a llorar por las calles, podemos cruzarnos de brazos y lamentarnos porque esto no mejora, podemos incluso dedicarnos a pasar de todo o intentar aprovecharnos del buen corazón de los demás.

No cabe duda son tiempos difíciles y podemos rendirnos. Pero no todos han aceptado bajar los brazos y conformarse con que otros resuelvan la situación, o con buscarse cada uno la vida por su cuenta, incluso muchos no han aceptado rendirse a sus valores y principios para hacer cualquier cosa con tal de conseguir lo que necesitan. Amar la vida en tiempos revueltos no es nada sencillo. Pero si encima nos invitan a vivir la vida amando cuando estamos en tiempos de “sálvese quien pueda”, todo parece una utopía. Pero nada más lejos de la realidad. Muchos son conscientes de que si no hacen nada por mejorar el mundo que tenemos, por cambiar un poco la injusticia, el sufrimiento, la pobreza, el hambre, el paro, etc. Tarde o temprano, estos tocarán en la puerta de sus vidas o en la de los suyos. Y muchos no están dispuestos a cruzarse de brazos, sino que siguen luchando por mejorar su “metro cuadrado”, su entorno, por intentar ayudar y echar una mano a quien lo necesita. De hecho, vivir es nacer a cada instante, empezar cada día nuevamente, y amar en la vida es disfrutar cada uno de esos instantes. Por todo esto y mucho más, otro año, algunos miembros de nuestro barrio,, se han puesto manos a la obra para preparar con cariño e ilusión, y con mucho, mucho esfuerzo, la fiesta del barrio en honor a San Matías apóstol, Ellos han dedicado de su tiempo, de sus bienes, de su descanso, etc., para que todos podamos en estos días disfrutar un poco de la vida, y para que riendo, participando, ayudando, divirtiéndonos sanamente y compartiendo, pasemos unos días amando la vida, y dando lo mejor de cada uno para hacerle también mejor estos días a los que tenemos a nuestro lado.

Buena Fiesta a todos y que Dios les bendiga y les mantenga el ánimo y la esperanza.

Vuestro Párroco: Quino

  

*El Lunes 14 de Mayo (festividad del Santo) a partir de las 19:30 horas Celebración de la Santa Misa y procesión de la venerada imagen de San Matías, con el siguiente recorrido.

 

San Matías: "Regalo de Dios".

14 de Mayo

Cayó la suerte a Matías, con lo que fue agregado

a los once Apóstoles.  (Hechos de los Apóstoles, 1, 26).

San Matías es el apóstol Número "13" (El 14 es San Pablo). Es un apóstol "póstumo" (Se llama póstumo al que aparece después de la muerte de otro). Matías fue elegido "apóstol" por los otros 11, después de la muerte y Ascensión de Jesús, para reemplazar a Judas Iscariote que se ahorcó. La S. Biblia narra de la siguiente manera su elección:

"Después de la Ascensión de Jesús, Pedro dijo a los demás discípulos: Hermanos, en Judas se cumplió lo que de él se había anunciado en la Sagrada Escritura: con el precio de su maldad se compró un campo. Se ahorcó, cayó de cabeza, se reventó por medio y se derramaron todas sus entrañas. El campo comprado con sus 30 monedas se llamó Haceldama, que significa: "Campo de sangre". El salmo 69 dice: "su puesto queda sin quién lo ocupe, y su habitación queda sin quién la habite", y el salmo 109 ordena: "Que otro reciba su cargo".

"Conviene entonces que elijamos a uno que reemplace a Judas. Y el elegido debe ser de los que estuvieron con nosotros todo el tiempo en que el Señor convivió con nosotros, desde que fue bautizado por Juan Bautista hasta que resucitó y subió a los cielos".

Los discípulos presentaron dos candidatos: José, hijo de Sabas y Matías. Entonces oraron diciendo: "Señor, tú que conoces los corazones de todos, muéstranos a cual de estos dos eliges como apóstol, en reemplazo de Judas".

Echaron suertes y la suerte cayó en Matías y fue admitido desde ese día en el número de los doce apóstoles (Hechos de los Apóstoles, capítulo 1).

San Matías se puede llamar un "apóstol gris", que no brilló de manera especial, sino que fue como tantos de nosotros, un discípulo del montón, como una hormiga en un hormiguero. Y a muchos nos anima que haya santos así porque esa va a ser nuestra santidad: la santidad de la gentecita común y corriente. Y de estos santos está lleno el cielo: San Chofer de camión y Santa Costurera. San Cargador de bultos y Santa Lavandera de ropa. San Colocador de ladrillos y Santa Vendedora de Almacén, San Empleado y Santa Secretaria, etc. Esto democratiza mucho la santidad, porque ella ya no es para personajes brillantes solamente, sino para nosotros los del montón, con tal de que cumplamos bien cada día nuestros propios deberes y siempre por amor de Dios y con mucho amor a Dios.

San Clemente y San Jerónimo dicen que San Matías había sido uno de los 72 discípulos que Jesús mandó una vez a misionar, de dos en dos. Una antigua tradición cuenta que murió crucificado. Lo pintan con una cruz de madera en su mano y los carpinteros le tienen especial devoción.

ORACIÓN

Oh Dios, que habéis puesto a San Matías en el número

de vuestros  Apóstoles,  haced,

por su intercesión, que sin cesar experimentemos

los efectos de vuestra inagotable misericordia.

Por JesuCristo Nuestro Señor.

Amén.